Acabo de regresar de mi primer vuelo a Londres, y a pesar de que imaginé sería increíble, me ví sobrepasada por la vibrante energía y belleza de la ciudad.
He tenido suerte, prácticamente siempre, me tocan tripulaciones excelentes, sobrecargos que no sólo trabajan muy bien, sino que saben ser compañer@s amables y cálidos y adultos responsables con los que sé que puedo contar en cualquier circunstancia.
En mi primer Madrid conté con pilotos que conozco desde que entré, hace 22.5 años, una CCB que como sobrecargo fué maravillosa y ahora como nueva compañera, no podría haber deseado a nadie mejor,y una tripulación muy, muy buena.
Sin embargo, en el Londres, además del CCB ,"mis niñas" resultaron sin par.Y encima, Londres, una ciudad con una historia que data desde antes de Cristo!
¡Qué historia tendrán ésas piedras y muros!, Lundunum, como le pusieron originalmente los romanos, emana, además de historia, una fuerza indescriptible.
Pensé que estaba enamorada de otras ciudades que admiro y amo, pero ahora, he encontrado la que sin duda se robó mi corazón, sin duda.
Ésta es apenas una introducción, quiero agradecer a las compañeras con las que he tenido fortuna de volar a éste lugar maravilloso y más adelante, reconocerlas, y felicitarlas por el impecable servicio que han dado a bordo y el vuelo tan emotivo que han hecho para mí.
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